UN POCO DE MINDFULNESS

La palabra "Mindfulness" significa "Atención Plena" o "Presencia Mental". Es un conjunto de técnicas que ayudan a desarrollar en quienes la practican la presencia atenta, reflexiva y focalizada en lo que está ocurriendo en el presente.

Hemos realizado una dinámica conocida como "Técnica de la Uva Pasa" con varios grupos de alumnos.

Con esta práctica buscamos darnos cuenta como la inmensa mayoría de las veces hacemos las cosas de forma mecánica. Su finalidad es que despertemos, que tomemos conciencia de lo que hacemos y de las cosas que nos rodean.

Para ello, uno de nuestros alumnos ofreció plato a sus compañeros para que tomaran una uva pasa.

Se induce un estado de silencio, aquietamiento y relajación en los participantes de la sesión.

Una vez conseguida, se dan dando indicaciones breves y concisas:

- Presta atención plena a la uva. 

- Ponla en la palma de la mano. Obsérvala. ¿Como es? ¿Qué color tiene? ¿Te has fijado en su brillo? ¿Te has fijado en sus arrugas? ¡Acariciala! Con cuidado.

-¿Cómo huele? ¿Te recuerda a algún alimento su olor? ¿Asocias ese aroma con algo? Hazte consciente de cualquier imagen o pensamiento que pase por tu cabeza.

- Tócala de nuevo. Hazla rodar entre las yemas de tus dedos. Apriétala un poco. ¿Qué tacto tiene? ¿Es suave o rasposa? ¿Dura o blanda? ¿Qué sientes cuando la tocas?

- Acerca muy lentamente la uva a tus labios y rózalos con ella. Toca ahora tus labios con la punta de tu lengua. ¿Notas algún sabor? 

- Acaricia la superficie de la uva con la punta de la lengua. ¿Cómo es su piel?

- Introduce ahora la uva en la boca y déjala allí. Siéntela, depositada en el medio de la lengua. Lámela como si fuera un caramelo. ¿Sientes su dulzor?

- Muerde la uva con muchísimo cuidado. Mastícala con mucha tranquilidad, con delicadeza, muy muy despacio. Experimenta y disfruta el simple acto de comer una sóla uva. ¿Notas los aromas que se desprenden? ¿Eres capaz de apreciar los sabores? ¿Cómo son?

- Cuando estés preparado para tragar tu uva presta atención al hecho. Detente a sentir cómo pasa la uva por tu garganta, como inunda todo de aroma y sabor, cómo recorre su camino hasta el estómago.

* Hay que decir que a la mayoría de nuestros alumnos no les gustaron mucho las uvas. Algunos confesaron no haberlas probado nunca antes, e incluso hubo quien se negó a comerlas ese día. Sin embargo, entre los que se animaron a seguir todos los pasos indicados hubo quien refirió no haber esperado nunca tanto para saborear y tragar un pedazo de alimento.

Animaos también vosotros a realizar esta práctica. Con uvas o con cualquier otro alimento. Con el tiempo descubriremos que poco a poco iremos consiguiendo poner atención plena al acto de comer. Sentiremos mayor placer aunque sin embargo, en realidad necesitemos tomar menos cantidad.

¡¡PRUEBA Y ENGÁNCHATE A ESTA SENCILLA FORMA DE MEDITACIÓN!!